sábado, marzo 01, 2008

Arbol de penes: ¿símbolo de fertilidad o afiche político?

A primera vista, el mural de Massa Marittima parece bastante similar a decenas de otros frescos medievales en la región italiana de Toscana.

Sin embargo, al mirar de cerca el árbol en forma de telaraña que domina el centro de la pintura, usted notará algo peculiar: sus ramas están cubiertas de penes.
 
Hay 25 de ellos en total, todos de diferentes formas y tamaños, completos con testículos. Cuelgan desde las extremidades del árbol, como hojas que revolotean al viento.

El mural data del siglo XIII y aún puede verse en una pared en el pueblo italiano de Massa Marittima, donde fue descubierto cuando se realizaban trabajos de restauración hace cuatro años.

Hasta ahora, se asumía que el árbol de falos era un símbolo de fertilidad porque se yergue en una fuente, el principal recurso de agua en los tiempos medievales.

No obstante, según un experto en Gran Bretaña, en realidad es una pieza única de propaganda política, comisionada por una facción toscana para mancillar la reputación de otro grupo.

"Es un afiche claramente político," dijo George Ferzoco, director del Centro para Estudios Toscanos de la Universidad de Leicester, en el centro de Inglaterra, al plantear su teoría sobre el mural.

"Es un mensaje de los Güelfos diciéndole a la gente que si a los Gibelinos les daban el poder traerían con ellos la herejía, la perversión sexual, disputas civiles y la brujería."

Los Güelfos y Gibelinos eran dos facciones que pelearon por el poder en la Toscana durante décadas en la Edad Media.

La región de la Toscana está situada en el norte de Italia.

Quizás la víctima más famosa de sus enfrentamientos fue el poeta Dante, un güelfo expulsado de su nativa Florencia en 1302 después de que un grupo rival de los Güelfos tomó el poder.

En el momento que se pintó el mural, los Güelfos controlaban Massa Marittima, un pequeño pueblo en el nordeste de la Toscana.

"Se presentaban a sí mismos como el partido de la limpia honradez en la vida política toscana y era tradicional para ellos, al lanzar sus ataques a los Gibelinos, calificarlos de herejes," dijo Ferzoco a Reuters.

"Los herejes, según la gente en la Edad Media, practicaban la sodomía. De ahí el árbol de falos."

Puede parecer un mensaje críptico para la mente moderna, pero Ferzoco dice que habría sido obvio para el toscano promedio de la época medieval.

Ferzoco dice que las mujeres con hábitos paradas bajo el árbol de penes son brujas, otra maldición que los Güelfos decían traerían los Gibelinos al pueblo.

El experto agregó que la pintura es uno de los retratos de brujas más antiguos conocidos en el arte occidental.

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